Después de más de una década investigando y recopilando sonidos, Claudio Solis , Curador chileno del sello “Agua y Sed ” (2009), presenta una autobiografía musical en una selección de 12 obras, reeditadas, para ser presentadas en formato físico de doble vinilo. Aplaudimos el riesgo de tomar el camino del crowdfunding para ejecutar este proyecto. Aquí nos cuenta un poco más a fondo sobre el proceso.
La idea es poder cambiar el paradigma actual de la industria musical con acciones concretas, que involucren a los seguidores junto con los artistas, para poder crear un ecosistema autosustentable, que hoy se hace necesario por las circunstancias sociales que vivimos, más aún para la industria musical y el pequeño nicho de música electrónica. El crowdfunding demuestra ser un sistema de financiamiento colectivo que funciona con mucho éxito en otros sectores, y hoy artistas de talla mundial como Kings of Leon, Christian Scott, Yazz Ahmed, Vulfpeck, Jim Guthrie, Ta-Ku, Amon Tobin, Jocelyn Reyes, Cavalier han podido concretar con éxito este tipo de proyectos, por lo que pretendemos demostrar que es posible llevar a cabo este tipo de iniciativas, sobretodo para músicos de nuestro país Chile.
En resumen, el modelo Crowdfunding nos permite agilizar el financiamiento a través de los fans, la producción y el despacho de los discos de vinilo. Sin una inversión inicial, podemos crear una campaña de vinilo y comenzar a recibir pedidos casi de inmediato. Esto nos permite eliminar el riesgo, entregando un producto de alta calidad y flexible, a través de una plataforma robusta que ya opera.
Pleroma ya está en preventa hasta el 15 de abril. Si a esa fecha llegamos a los 200 mecenas, el proyecto se materializa, y si no, la plataforma devuelve los fondos recaudados.
# Revisa el proyecto aquí
La recopilación incluye canciones que trabaje de manera independiente o que fueron parte de compilaciones del sello Agua y Sed, que en su momento se publicaron pero que hoy no se encuentran disponibles en streaming o descargas, por lo que fue un desafío volverlas a compilar, revisar el trabajo de mezcla y master de antiguos proyectos, y re editarlas para hacerlas coincidir un poco con el contexto actual creativo en el que estamos como sello, y como me gustaría que sonarán; muchas de estas eran más largas, o tenían otro humor, otra velocidad. Frente a esto, el trabajo final en macro se vuelve algo súper íntimo, ya que son obras puestas en una línea de tiempo de casi 10 años, por lo que tuvieron que suceder muchos acontecimientos que inspiraron o gatillan estos resultados, sumados a la misma experiencia acumulada, poder volver a discernir cuáles canciones merecían ser revividas y publicadas de esta forma, que busca ser un ejercicio no solo individual si no también colectivo; apunta a la evaluación colectiva del trabajo realizado para su ejecución, por lo que representa para mi, un gran desafío no solo artístico, si no también social.
En ese ejercicio, siempre como sello estamos buscando maneras de darle una vuelta más al trabajo editorial, poder generar un impacto mayor con el trabajo y que no solo se conviertan en canciones en la nube y/o un resultado netamente autorreferente.
Es por eso que vi hace años el modelo crowdfunding como una oportunidad de convertir todo ese trabajo en un resultado tangible, y en todas las probabilidades que tenía, quise apostar por mi propio trabajo para poder medir el impacto de un ejercicio social como el salir a “golpear puertas para su ejecución”, y ya que era yo el que promovía la idea, decidí dejar el miedo a un lado y tomar el liderazgo de salir a testear el modelo crowdfunding con mis canciones; cual “conejo de indias”, con la esperanza de que en un buen escenario llegue a funcionar, pueda de la misma forma ser voz de inspiración para otros artistas, y mostrar que se puede.
La idea del crowdfunding ha estado hace muchos años, sobre todo la que ofrece la plataforma Qrates , en la que tenemos alojado el proyecto. y junto a mi socio siempre la tuvimos como una opción para poder llevar a algo tangible lo que producimos, porque la otra es comerse el orgullo y pagar de nuestro bolsillo la producción física, y ahí el riesgo es más crítico. Nos daba vueltas la idea de montar un crowdfunding pero había que tragarse un poco la timidez y salir a mostrarlo y conseguir el apoyo. Creo que después del escenario social que hemos estado viviendo este último tiempo, la dirección del sello está con más energía que nunca, porque si no vamos por el todo nosotros mismos, nadie lo va a hacer. Es así como estamos llevando el proceso, con muchas ganas, tratando de mostrar que queremos crear nuestra propia realidad de manera activa.
Si llego a fallar en llegar a la meta, no me importa, por que ya me tiene satisfecho el haberlo intentado. Pero si llegamos a los 200 mecenas antes del 15 de abril del 2021, no solo demostraría que es posible para mi, si no para muchos de los artistas que están detrás de nuestro sello, y claro, haciendo parte también a la comunidad.
Hasta el momento la respuesta ha estado llena de sorpresas, muchas personas de nuestro entorno no dudaron en organizarse y apoyarnos en grupo, y nos parece genial, todo es válido. Ha sido hasta ahora una tremenda experiencia, y nos quedamos con un buen gusto sobre las personas que consumen música electrónica.
Se ha sentido mucho mejor que un release normal, ya que existe la posibilidad de concretar el trabajo en un formato físico y eso no ocurre todos los meses en nuestro sello, más aún cuando el resultado es posible gracias a las personas que siguen nuestro sello o que escuchan nuestras publicaciones, o que siguen a los artistas involucrados. Nos desenvolvemos en un nicho muy pequeño, y es lindo sentir el apoyo incondicional que nos han entregado, nos motiva a seguir trabajando con más ganas!
Queremos cambiar la forma de expandir la música de nuestros artistas locales. No importa si haces reggae, reggaetón, metal, jazz o folclore. Si creamos un vínculo con nuestra audiencia, podemos cambiar el resultado de nuestra música y el impacto que pueda generar en la audiencia. Nosotros hacemos música electrónica en un pequeño nicho, y creemos que si nosotros podemos lograr financiar un vinilo gracias a nuestros fans, cualquier músico, artista, productor o banda de otro género también puede hacerlo, si se lo propone de manera activa. Con esto buscamos inspirar a los artistas y también a los amantes de la música. Estamos muy agradecidos de poder contar con el apoyo de las personas y también del espacio en South Plug.
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