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OMEGA dB: La Dedicación Siempre Paga

Tuvimos el privilegio de conversar con el prodigioso Adrián Gázquez, aka OMEGA dB. Este artista nos llevó por un viaje a través de su trayectoria, desde la infancia hasta la creación de un legado musical que continúa vibrando en los escenarios. Sintonicemos con su apasionante historia.

 

¿Podrías compartir con nosotros más acerca de tu camino y tu proyecto?

Mi viaje en este proyecto comenzó en 2014, con el primer EP. Sin embargo, la semilla se había plantado mucho antes; este proyecto es, en realidad, una vida entera. Antes de ese primer lanzamiento, me sumergí en el mundo de la música electrónica como DJ en diversas fiestas, extendiendo sus límites. La música, especialmente de este género, ha estado presente en mi vida desde muy joven. Al final, se ha convertido en mi estilo de vida y ha estado siempre a mi lado.

 

Resulta fascinante que un niño construya su camino musical en la electrónica. ¿Qué te atrajo especialmente de este género?

Es ciertamente curioso, dado que soy el más joven de cuatro hermanos y todos ellos son más bien amantes del rock. Recuerdo que en los años 90, mi hermana visitó un museo en Berlín y me trajo un CD con un mix de Paul van Dyk. En ese momento, sentí que había descubierto un universo nuevo; me conecté profundamente con la música electrónica y desde entonces no he parado.

 

 

¿Cómo describirías la evolución de ese momento clave en tu vida?

Inmediatamente, comencé a investigar y coleccionar vinilos para convertirme en DJ. Era una experiencia muy romántica; tenías que viajar, moverte y explorar tiendas de discos, en Barcelona en mi caso, para encontrar joyas sonoras. La posibilidad de descubrir música sin depender de un algoritmo es algo maravilloso.

 

¿En qué años te sumergiste en la escena de las raves como DJ?

Fue a principios de los 2000, específicamente entre 2002 y 2007. Junto a un amigo, Boris, formamos un colectivo llamado ‘I Love Techno’ y organizábamos fiestas en zonas montañosas. Incluso incluíamos un espacio para el Hardcore. Era una experiencia fantástica; había espacio para todos.

 

 

Sin embargo, parece que hubo un cambio en esa escena. ¿Qué ocurrió?

Con la llegada de la Mossos de Esquadra y otros cuerpos policiales, la situación se complicó. Las sanciones se volvieron más severas y nuestros equipos eran confiscados. A pesar de los estereotipos, éramos muy conscientes y cuidadosos. Recogíamos todos los residuos y respetábamos el entorno. Es triste que terminara porque era una hermosa manera de conectarse con la naturaleza y la música sin restricciones. Además, la música electrónica a menudo se estigmatiza erróneamente como relacionada con drogas o alcohol, lo cual no es siempre el caso. Personalmente, soy deportista, y algunas personas se sorprenden cuando lo descubren en entrevistas.

 

Hablemos de tu proceso creativo. ¿Tienes una rutina o es más espontáneo?

Siempre intento dedicar al menos una hora al día a mi música. Aunque tengo muchas máquinas, es importante no excederse, ya que el exceso puede bloquear la creatividad. El proceso de aprendizaje de la maquinaria lleva tiempo y puede limitar la creatividad. Siempre tengo dos o tres ideas fijas en mente, con las bases rítmicas, sintetizadores y bajos ya sincronizados.

 

¿Podrías contarnos cómo comenzó tu colaboración con Teenage Engineering? Eres el primer español en hacerlo.

Mi entrada en el mundo de Teenage Engineering ocurrió cuando empecé a crear música y videos. Un día, se me ofreció la oportunidad de actuar en Londres. Allí conocí a varios miembros del equipo, lo que eventualmente me llevó a formar parte de su equipo de mentores y actuar en su nombre. En resumen, me convertí en una especie de embajador.

 

¿Qué significa ser un embajador de Teenage Engineering?

Significa que cualquier artista interesado puede ponerse en contacto conmigo, y yo estoy aquí para enseñarles cómo funcionan los productos y resolver cualquier duda que tengan. También asisto a eventos oficiales en España y en el extranjero. Como miembro, colaboramos con la mejora de las máquinas y la identificación de posibles fallos.

 

 

¿Qué proyectos tienes actualmente en marcha para OMEGA dB?

En este momento, estoy trabajando en un nuevo EP, afinando cada detalle. Además, planeo crear un cortometraje junto a mi hermana, con un guión que hemos escrito juntos. Quiero que esta experiencia sea no solo musical sino también narrativa y conceptual.

También estoy involucrado en un video podcast de literatura en catalán, que busca acercar la literatura catalana a un público más amplio. Junto a mi hermana y una amiga, trabajamos en este proyecto en el que ellas, como escritoras y profesoras de literatura, aportan su experiencia al equipo. La profesionalidad que aportan hace que seamos un equipo muy unido y apasionado.

 

El legado musical de OMEGA dB sigue resonando a medida que su carrera avanza hacia nuevas y emocionantes fronteras. Estaremos atentos a sus futuras creaciones y colaboraciones, sabiendo que este artista continúa llevando la música electrónica a nuevos niveles de innovación y expresión artística.

 

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